Dragonlance: El caballero de Solamnia
La primera trilogía de Héroes de la Dragonlance tiene su cierre con la que sin duda es la mejor novela no solo de esta, sino de ambas trilogías. Hablo de El caballero de Solamnia, de Michael Williams y con portada del mismísimo Larry Elmore, una fantástica ilustración de los dos personajes protagonistas. Resulta interesante ver que dos de las tres novelas de esta primera trilogía han sido protagonizadas por caballeros. Por otra parte, y con relación a la segunda trilogía de Héroes de la Dragonlance, es curioso ver que esta ofrecerá continuación a las novelas que forman la primera trilogía. En el caso que nos ocupa, el propio Michael Williams es el autor de El caballero Galen, novela que cerrará esa segunda trilogía y que retomará a los personajes que se nos presentan aquí. Debo señalar también que me ha resultado la más fresca, interesante y divertida de las seis novelas de Héroes de la Dragonlance, superando incluso La Leyenda de Huma, que es un clásico dentro de la Dragonlance. Así que, si solo vas a leer una de ellas, ¡que sea El caballero de Solamnia!
Siempre es grato encontrarse con una novela de la Dragonlance escrita por Michael Williams, y El Caballero de Solamnia no solo no es una excepción, sino que probablemente sea una de las que, a nivel personal, más he disfrutado de dicho autor. La trama reúne al noble y heroico caballero Bayard Brightblade y al joven Galen Pathwarden, apodado la Comadreja e hijo menor de un antiguo caballero de prole, digamos, dispersa, que se compone de un patán grandote, un cándido místico y un joven pilluelo, tan rápido de mente cuando es sorprendido en alguna de sus travesuras como de pies cuando hay alguna clase de peligro que enfrentar. Si bien al principio el plan era que el mayor de los tres hermanos (el patán grandote) se convirtiese en escudero del caballero, ciertos incidentes relacionados con un misterioso y siniestro individuo apodado El Escorpión hacen que finalmente sea el joven Galen quien se una al caballero como escudero y aprendiz, más o menos.
La trama resulta fascinante y de lo más interesante. Mezcla diversos géneros muy populares: el de las novelas espada y brujería y de capa y espada, así como las clásicas historias de caballerías e incluso la picaresca nacida en España, pues no hay duda de que Galen es un fiel reflejo de personajes como el popular Lazarillo de Tormes. Hagamos un repaso: un caballero y su escudero y aprendiz emprenden un viaje hacia una fortaleza, el castillo Di Caela, donde el caballero pretende participar en un torneo por la mano de la joven heredera del lugar. Por el camino se verá entorpecido por un villano, El Escorpión, que, con su aspecto de bandolero y su embriagador encanto bien podría recordarnos a personajes tan conocidos como Robin Hood o El Zorro, con la diferencia de que El Escorpión es un villano de los pies a la cabeza. ¡Tan villano resulta que no tiene escrúpulos a la hora de usar pérfidas brujerías contra los protagonistas, que tan solo cuentan con su acero y sus propias destrezas para protegerse de la brujería! Por si todo esto fuera poco, Comadreja hace valer su apodo y demuestra que es tan cobarde, embaucador y mentiroso como parece, o puede que incluso más. Por si todo esto fuera poco, en la novela también tienen cabida un puñado de centauros, viejas maldiciones envueltas en historias y mitos, desconocidos caballeros misteriosos, un feroz guerrero que protege un puente y otras muchas y muy divertidas aventuras que sin duda sorprenderán al lector.
JOAQUÍN SANJUÁN
www.grimnir.es